Arnau y Joan estudiaron juntos en el colegio los Robles. Desde pequeños siempre se interesaron por la ciencia y la tecnología, incluso ganaron varias veces en la feria de ciencias y concursaron internacionalmente con su MT/01, un robot que construyeron con ayuda de sus padres en el último año de escuela.
Pasados unos años, Arnau y Joan se volvieron a encontrar en una empresa de tecnología de Barcelona. Un día caminando de regreso a casa hablaron brevemente sobre la idea de volver a construir el robot de la escuela, pero esta vez no solo por diversión, sino que buscarían la forma de que este robot pudiese ayudar al mundo.